Todo el mundo está en su derecho de vivir el domingo nublado en una depresión profunda e irremediable, claro que también existe la posibilidad de observar los colores de las flores y las plantas propias o del barrio o de otros barrios y para cuando se largue entrar en un teatro y participar de esa, siempremágica ceremonia, aaaaaaahhhh! de cenar una pizza y mucho para contar, salu! |